A-D-V-E-R-T-E-N-C-I-A tiene contenido yuri :B
Si alguien hubiese echado un ojo a aquella
imponente casa de ladrillos rojos situada en uno de los barrios más caros de
Sevilla, rodeada de un inmenso jardín repleto de setos podados con pulcritud,
esculturas talladas en mármol y las más estrictas medidas de seguridad…Jamás
habría imaginado que sus ocupantes pudiesen pasar la noche del domingo de
aquella forma:
-
1,2,3,4,5…¡Y me coloco en la recta final! Rafa, espero que tengas una buena
pregunta porque esta noche estoy imparable.
Y es que Rafa, a pesar de tener tan solo 28 años,
ser dueño de más de la mitad de las acciones de la empresa de su padre, y
vivir a sus anchas en aquel caserón…Adoraba los juegos de mesa. Pero no
cualquier tipo de juegos.
Juegos de ingenio.
Preguntas que te hacia exprimir el cerebro,
criptogramas, juegos de palabras, claves ocultas. Todo eso combinado con
preguntas históricas, de arte, ciencias y geografía en una mezcla explosiva que
había dado lugar a aquel curioso juego. Una versión mejorada del Trivial,
alrededor de cuyo tablero se reunían todos los domingos por la noche 5 nuevos
osados jugadores, normalmente compañeros de trabajo, con sus respectivas
cervezas, sus nubes de humo y sus frases características al tirar los dados,
con un firme propósito: ganar…
¿Pero a quién?
Sin duda, lo mejor de aquellas noches era ver
como su amiga Isabel, con apenas 17 años, piel morena y rizos castaños,
le daba una paliza a todos aquellos que intentaban vencer su ingenio.
-
Está bien- preguntó Rafa- ¿De que color es la casilla?
-
¡Naranja!- respondieron al unísono dos de sus compañeros. Al parecer estaban un
poco tensos. La competitividad que un simple juego de mesa puede generar y el
hecho de que Isabel llevaba acertando sin parar y estaba apunto de llegar a la
casilla final, era demasiado para ellos. Eso y que perder ante alguien más
joven se les hacía casi un insulto. Rafa sonrió maliciosamente a Isabel
mientras sacaba las preguntas de un sobre sellado de color naranja…
La categoría era sobre juegos de palabras. Nadie
la ganaba en eso.
Rafa vio como la mirada de Isabel se iluminaba.
Sabía que los nuevos retos la apasionaban casi tanto como a él. Aunque claro,
ver como sus compañeros de trabajo se mordían las uñas, se aflojaban el nudo de
las corbatas agobiados y sus neuronas se consumían como las colillas de sus
cigarros se le hacía prácticamente igual de apasionante, por no decir
divertido.
-
La cosa va de diminutivos- dijo tras leer la tarjeta atentamente- Tienes que
decir la palabra buscada y el correspondiente diminutivo. ¿Preparada?
Isabel asintió sin apartar la mirada. Rafa giró
el reloj de arena y dijo:
-
Primera pregunta… ¿Animal cuyo diminutivo dispara?
-
Gato y gatillo – A Isabel no le llevó mas de dos segundos pensar la respuesta.
-
¿La que va despacio, cuyo diminutivo se pone en el ojo y ves mejor?
-
Lenta y lentilla
-
¿Da uvas y su diminutivo sirve para hacer churrascos?
-
Parra y parrilla.
-
¿Figura geométrica cuyo diminutivo está helado?
-
Cubo…cubito.
El resto de jugadores la miraban con intensidad.
Mitad sorprendidos, mitad abatidos…Realmente estaba imparable.
-
¿Qué no practica el sexo y su diminutivo es una enorme casa con almenas?
-
Ese es Rafa- bromeó uno de sus compañeros- ¡Que no se come una rosca desde hace
un año!
Isabel reprimió una risa ante la mirada asesina
que Rafa le dedicó a su compañero.
-
Casto y castillo- comentó divertida.
-
Tira los dados antes de que se acabe el tiempo- Rafa aún parecía resentido.
Casilla marrón: historia.
Rafa leyó en silenció la pregunta que había
sacado del sobre y dejó escapar silbido proporcional a la dificultad de la
pregunta.
-
Isa…si aciertas esta, te lo juro, te pido en matrimonio- comentó divertido- De
acuerdo, ahí va: ¿Qué rey y de que país estaba convencido de que el café era un
veneno y para demostrarlo condenó a un asesino a tomar café todos los días
hasta que muriese y a otro delincuente le indultó con la condición de que
bebiese té a diario?
Se oyeron algunas risillas y alguien comentó que
“¡por fin iban a poder tirar los dados de una maldita vez!”
Sin embargo, Isabel permanecía con los ojos
fuertemente cerrados. Parecía estar intentando recordar algo lejano.
-
Gustavo III de Suecia- dijo triunfal. Todo el mundo se quedó callado y Rafa
parpadeó un par de veces.
-
No nos vaciles anda- dijo socarrón uno de los jugadores- ¿Verdad?- preguntó
algo asustado a Rafa.
-
Es correcto – dijo éste, casi sin creérselo.
-
Y… – continuó Isabel regodeándose en su minuto de gloria- El experimento fue
seguido por una comisión médica y resultó un fracaso: Los primeros en morir
fueron los médicos, luego el rey y muchos años más tarde el bebedor de té y por
último, el bebedor de café.
-
¡Eres una puta enciclopedia con patas!- dijo abatido uno de los jugadores.
Isabel sonrió para si misma y volvió a tirar.
Bajo la atenta mirada de todos, los dados y el
azar la llevaron a las dos últimas casillas.
-
“Preguntas de pensamiento lateral”- leyó uno de los jugadores- ¿Qué es eso?
-
Ya lo verás – Isabel vio como Rafa sonreía misterioso. Ese tipo de preguntas
eran nuevas incluso para ella- El primero que sepa la respuesta puede
contestar.
Giró de nuevo el reloj de arena y sacó una
tarjeta de una pequeña caja y leyó en voz alta:
-
Un hombre va a comprar al supermercado. Tras pagar en caja, la cajera le
entrega el ticket de la compra. El hombre lo toma y con un bolígrafo escribe en
él lo siguiente: 3×2=6. La cajera lo mira atentamente mientras escribe la cifra
y de pronto exclama sorprendida: ¡Es usted marinero!… ¿Cómo pudo saberlo?
pronto suubire la continuación :3